Sopa de coco, jengibre y guindilla - Vitrinor Magefesa

Después de una semana un poco rara, todo empieza a ponerse en su sitio. Este martes no pude publicar la receta porque no me dio tiempo de tenerla preparada. Y para hacerlo mal, mejor no se hace.

La receta de esta semana es algo nuevo para mi ya que es la primera vez que la preparo en casa. Se trata de una sopa de coco, jengibre y guindilla. Puede tomarse fría, tibia o caliente. A vuestro gusto.

Esta receta no es muy picante, así que podéis ir jugando con la cantidad de guindilla que pongáis para conseguir una sopa más picante o menos picante.

Como la mayoría de mis recetas, esta la encontré en uno de mis libros de cocina. Y creo que se quedará en mi recetario para prepararla otro día.

Siempre es un placer trabajar de la mano de Vitrinor Magefesa, y es que sus ollas hacen que la cocina parezca un mundo mejor. La comida se calienta más rápido, no te quemas al coger la olla de los mangos aunque haya algo hirviendo dentro y son super fáciles de limpiar. El tiempo que te sobrará usando estas magnificas ollas lo puedes aprovechar para practicar nuevas recetas y sorprender a tus invitados.

Esta sopa puede ser un menú ideal para llevarte a la oficina. Puedes prepararla un día cualquiera y conservarla en tuppers individuales en el congelador hasta 12 semanas. Únicamente tendrás que dejarla unas 6 horas en la nevera para que se descongele por completo. Y si resulta que al final te invitan a comer por ahí, puedes conservarla una vez descongelada hasta 4 días en la nevera. Así que no tendrás escusa para no hacerla. Si es que todo son facilidades para comer bien.

Sopa de coco, jengibre y guindilla - Vitrinor Magefesa

Preparación: 10 minutos

Cocción: 20 minutos

Raciones: 4

Ingredientes

3 puerros

1 manojo de sofrito

1 raíz de jengibre del tamaño de una nuez

1/2 guindilla fresca

1 lata de leche de coco (yo usé la marca Blue Dragon)

300 ml de nata

Sal y pimienta blanca

Elaboración

En nuestra olla Crystal Due de Vitrinor Magefesa calentamos unas dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra.

Cortamos los puerros y los sofritos en juliana fina, los añadimos a la olla y cocinamos a fuego medio (no deben coger mucho color). Una vez rehogados añadimos el jengibre y la guindilla. Cocinamos dos minutos y añadimos la leche de coco y la nata. Dejamos que empiece a hervir, salpimentamos a nuestro gusto y retiramos del fuego.

Trituramos la sopa y la colamos por un colador de malla fino, así retiraremos todos los grumos y conseguiremos una sopa de textura fina y suave.

Ya os he comentado que podéis servirla caliente, tibia o incluso fría. También podéis servirla con unos crostones de pan o lo que más os guste.

Comer bien ya no será un problema de tiempo, dinero o pereza. Todo dependerá de vosotros mismos.

Yo te espero la semana que viene con una nueva receta.

¡Un saludo! 

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