Esto de estrenar las cosas en el momento que las consigo creo que no es lo mio. Os cuento esto en referencia a estos magníficos moldes de tartaletas individuales que me regalo mi novia hace ya bastante tiempo. Me hizo mucha ilusión que me los regalase ya que hacia tiempo que quería unos, pero mi memoria es tan escasa que los metí en mi caja de trastos de pastelería y ahí se quedaron. Se que me querréis matar, pero os pido que me queráis como soy, todo un desastre.
Y es que es comodísimo preparar una tarta de crema pastelera con fresas en version individual porque a la hora de servir la presentación es mucho más bonita. También me gusta hacerlo en versión grande porque en verdad es más "rápido" de hacer, pero a la hora de cortar y emplatar encuentro que en versión individual, al no romperse la pasta brisa, queda mucho más vistoso.